Buenos y malos profesionales

En un par de dí­as he tenido una serie de experiencias profesionales interesantes, dignas de reflexión.

Por un lado, he tenido la desgracia de contactar con el «responsable de informática» de una de las empresas a las que dábamos soporte hace un tiempo. El responsable en cuestión, que se hizo cargo de una red pequeña, con sólo un par de servidores GNU/Linux y unos pocos servicios para una red de equipos de oficina, al parecer no tiene ni la más remota idea de lo que es un GNU/Linux. Es más, no sabe ni como «entrar» en ellos.

Es triste, pero es así­. Un «profesional» que se hace cargo de algo así­, le entregamos una documentación sobre todo lo que hay montado, servicios, funcionamiento… Y cuando pasan unos meses te enteras que no sabe ni como hacer login en los servidores. Y pensar que nosotros (el equipo informático al que pertenezco) nos preocupamos por hacer las cosas todo lo mejor que podemos. Snif!!!

Pero siempre hay otra cara de la moneda. Ayer, sin ir más lejos, aquí­ el que escribe metió la pata hasta el fondo con un servidor. Hice algo que deberí­a haber pensado unos segundos más antes de hacerlo y dejé sin servicio un servidor entero, lo que significa que mucha gente se quedó sin sus herramientas de trabajo habituales. :P

Mientras solucionaba mi metedura de pata con un plan de contingencia ya establecido para estos casos, tení­a en mente ese servidor, esa consola abierta, esos comandos inoportunos y mi incompetencia. Dos horas más tarde todo habí­a vuelto a la normalidad.

Lo bueno viene que hoy me comenta Xisco Lladó que ayer le abrieron una incidencia referente a ese servidor (inutilizado desde mi metedura de pata) los proveedores del servicio. Se habí­an dado cuenta del problema, tras hacer algunas comprobaciones realizaron la pertinente reparación y además pusieron sobre aviso de «como» se habí­a realizado, indicando que se revisase la seguridad de ese servidor y confirmar que no estaba comprometido.

Estos son buenos profesionales. Un buen servicio y sin duda eficaces. Profesionalmente, de mayor quiero ser como ellos. :P

La reflexión es: ¿Este es el famoso equilibrio mundial del que se habla? ¿Por un profesional ejemplar y competente debe haber siempre en algún lado un completo inutil que compense la balanza? ¿El famoso Ying Yang?

¿Subversion o Mercurial?

En la empresa en la que trabajo se ha puesto en marcha un proyecto para trabajo colaborativo de software libre. Entre otras cosas, vamos a montar un servidor con repositorios y proyectos abiertos al público para sus descargas y colaboración.

Como es lógico, la condición es que todo lo que se cuelgue en los repositorios tenga licencias libres. :)

Pero vamos al grano, de momento soy el encargado de montar el sistema de control de versiones. Yo llevo muchos años trabajando son Subversion, los últimos años trabajando con Subversion+Trac y estoy realmente contento con esa combinación.

Me han propuesto que le pegue un vistazo a Mercurial+Trac, que al parecer es muy buena combinación. Le he pegado un vistazo por encima y parece estar bien, pero se me plantea el problema de elegir entre algo estable, probado y extendido (svn+trac) o algo un poco más verde, menos extendido aunque prometedor (mercurial+trac).

¿Que opinais los expertos? ¿Conviene montar Mercurial en un servidor para acceso público y en producción con muchos proyectos? ¿Mejor ir a lo seguro y montar Subversion+Trac y los experimentos que sean en casa y con gaseosa? :P