Categoría: Opinión

Leo un apunte muy interesante en el weblog de Benjamí­ Villoslada donde explica el problema que se le presenta cuando su hijo le pide que quiere hacer los deberes y no puede, por que no tiene un Windows en casa.

Benjamí­, que siempre procura explicar las cosas bastante bien, escribe una carta al profesor de Arnau (su hijo) exponiendo su problema y su postura al respecto.

Es muy recomendable su lectura, tanto, que me he tomado la libertad de hacer una traducción libre al castellano. Espero que disculpeis los errores.
Sigue leyendo Carta al profesor

Hace un par de dí­as me di cuenta que estaba utilizando las palabras de Richard Stallman en una conversación personal, mientras asesoraba sobre software.

La conversación trataba de elegir entre utilizar MacOS o GNU/Linux en un iBook recien comprado. La persona propietaria del nuevo iBook tiene conocimientos a nivel de usuario de ambos sistemas, pero temia encontrarse con problemas que no supiese solucionar por si misma con un GNU/Linux.

Pues de pronto me vi a mi mismo diciendo:
–Utilizar MacOS o GNU/Linux en tu caso es más un asunto de ética que práctico, ya que con los dos vas a poder utilizarlos exactamente al mismo nivel de producción.

Claro, la explicación continuaba detallando como actualmente puede instalarse una Kubuntu o una Debian una persona con conocimientos básicos en un portátil de estas caracterí­sticas sin que fuese una odisea de problemas (como hace algunos años, que costaba un pelí­n más).

Mientras más tiempo pasa, más me doy cuenta de que la barrera del uso de un software libre o no libre está en las personas, en su capacidad para darle la importancia pertinente a la ética más que a lo práctico (aunque pocas veces existan diferencias en lo práctico) y en mi capacidad de saber explicarlo bien.

Quizá por eso, por lo de explicarlo bien, utilizo casi sin darme cuenta frases que he escuchado previamente de personas como Richard Stallman, Ricardo Galli o Lorení§ Valverde (entre otros muchos).

¿Que citas recuerdas o utilizas tú respecto al software libre? :)

A lo largo del fin de semana he sufrido nuevamente el acoso tí­pico del «pringao informático« que tiene que ayudar a la gente por que es casi su obligación. Y claro, al negarme, he quedado como el malo de la peli.

Por un lado tengo un familiar, que se presenta en casa con un equipo con las instrucciones de «Que me han dicho que le instales a esto un windows». Bueno, el acto reflejo de mis neuronas es lo de soltar una carcajada a lo malo malí­simo, como si de M.A.D. (el malo del inspector Gadget) se tratase. Pero tras contar mentalmente una serie de números, inspirar y expirar profundamente e intentar parecer tranquilo, digo:

– No, no voy a ponerte ningún windows en ningún sitio. – Le doy la opción de poner una distribución libre.

Casi mejor voy a omitir el resto, pero bueno, al final se ha llevado el equipo tal y como se lo ha traí­do, vamos, que nada de nada, soy el malo de la peli. :(

Después llega mi madre, que vení­a del trabajo, diciéndome que llame a la oficina, que tienen no se que problema con el ordenador, a ver si se lo puedo arreglar. Apuuffff. El mismo proceso de relajación que el anterior, pregunto el número y digo al que me coge el teléfono:

– ¿Que le pasa a tu servicio técnico, que no te hace caso? – Vamos, que lo dejo claro desde un principio.

Pues nada, me cuentan el problema, le digo que es lo que podrí­a mirar directamente y no se le ocurre otra cosa que decirme esa famosa frase de:

-¿Y tú no puedes venir a mirarlo? – Joder, este Déjí  Vu lo he tenido ya demasiadas veces.
-No, no, yo es que ya no me dedico a eso. Adiós, adiós…

Pues bien, de nuevo soy el malo de la peli. Hay que ver. Lo peor es que intentar explicarlo una y otra vez es perder el tiempo, siempre te acaban mirando como si fueses un borde que no quieres ayudar a nadie (cosa que no es cierto, siempre doy la opción de ayudar, pero con software libre).

No hubiese escrito esto si esta tarde se hubiese repetido la misma escena, esta vez una llamada a un amigo con el que estaba en la playa, pasando el rato. Se ha tirado unos quince o veinte minutos enganchado al teléfono, en domingo, intentando explicar esto y aquello sobre un windows (creo que la solución ha quedado en formatear, como siempre). Y digo yo, si se me ocurre llamar a mi mecánico en domingo para que me diga como cambiarle la bujia a mi coche por que suena raro, ¿no me enviará a freí­r monas?

Apuffff… Me he cortado un poco, pero ya lo he soltado. :)

Hace no mucho tiempo, comentaba con uno de mis compañeros de trabajo la suerte que tenemos a la hora de poder trabajar de lo que nos gusta y en lo que nos gusta.

Hace muy poco Ricardo Galli ha puesto un podcast con tí­tulo «El jefe me obliga» donde dice en pocas palabras algo bastante interesante.

Me doy cuenta de que en cuestión de trabajo he tenido bastante suerte, por que los pocos cambios de trabajo a lo largo de mi vida, siempre han sido para superarme un poco más en conocimientos. Hoy por hoy, trabajo al 100% con sistemas operativos libres (generalmente Debian) tanto en servidores como en estaciones de trabajo. Trabajo en un puesto donde se le da prioridad siempre al software libre. En una empresa que ofrece como primera opción a sus clientes software libre.

Vamos, que estoy contento en mi trabajo. Aunque incluso estando es esta situación, el software privativo me toca las narices de vez en cuando, teniendo que modificar código de alguna página web (una vez terminada y validada) por que el dichoso navegador de turno no las visualiza correctamente. A ver si hay suerte y se impone de una vez el Firefox como lider de navegadores. :)

Bueno, después de todo este rollo, lo que querí­a decir es que Ricardo tiene toda la razón. Ahora mismo si me encontrase con la situación que expone en su podcast, probablemente no me lo pensarí­a mucho para cambiar de trabajo, ya que dejarí­a de ir a trabajar cada mañana con las ganas con las que voy hoy dí­a.

Citandome a mi mismo sobre un post de seguridad y software libre:

Para aquellos que defienden el código cerrado, el secretismo y la ofuscación. Hay otra forma posible, es abierta, es libre. :)